La obesidad es el exceso de grasa corporal y supone un problema grave de salud por las consecuencias que tiene a largo plazo en los órganos del cuerpo y en las articulaciones. Para saber si padecemos obesidad es útil calcular el índice de masa corporal:

ÍNDICE DE MASA CORPORAL ( IMC) 
Se calcula con la fórmula:
peso en kilos dividido por la estatura en metros al cuadrado

IMC =  peso (kg)  / talla (m 2)
20-25 ( peso normal )
26-30 ( sobrepeso )
31-35 ( obesidad )
> 36 ( obesidad mórbida ) 

Si padeces obesidad tienes mayor riesgo de desarrollar un amplio espectro de enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, apnea del sueño, problemas cardiovasculares, cáncer, depresión y problemas musculo-esqueléticos, entre ellos los derivados de la columna. Los datos de Estados Unidos, que es un país en el que existen un 35% de obesos, revelan que las personas con peso normal tienen un 3% de riesgo de sufrir problemas importantes de columna, frente a los obesos con un 8% y los obesos mórbidos un 12%, es decir, a mayor IMC encontramos más problemas serios en la columna. 

Además de comer más cantidad de lo necesario, abusar de los ultraprocesados o llevar una dieta poco equilibrada, se ha visto que el ganar peso esta relacionado con ser sedentario o la disminución de la actividad física. En el caso de la columna esta relación es todavía más directa: si un paciente gana peso de forma rápida y aumenta el sedentarismo o disminuye aunque sea de forma mínima su actividad física, hay altas posibilidades de que aparezca dolor en la espalda [1]. 

¿ Por qué la obesidad agrava los problemas de columna? 

La obesidad troncular es la más asociada con problemas de espalda, ya que en ella la grasa se distribuye sobre todo en el abdomen entre las vísceras y provoca un desequilibrio en la carga. El peso de la barriga obliga a la zona lumbar a aumentar su curvatura para soportar el peso, y con el tiempo se van a sobrecargar las facetas que son la zona posterior donde articulan las vértebras. Los discos intervertebrales también se ven obligados a soportar mucho más peso del que están diseñados para aguantar. Las articulaciones sacroiliacas se colocan en una posición de flexión por inclinación de la pelvis y también sufren sobrecarga [2] .El propio peso produce disminución de la condición física, cansancio y dificultades para caminar que en ocasiones es difícil de diferenciar de los síntomas que provocan los problemas de columna.

¿ El aumento de peso puede acelerar el proceso de degeneración discal? 

SI…Muchos estudios han establecido una relación clara entre dolor de espalda y obesidad, y entre mayor desgaste de discos en pacientes con mayor peso corporal… las personas obesas tienen hasta 5 veces más riesgo de desgaste de discos que las personas con peso normal ¿ Y por qué ocurre eso? 

La obesidad se ha relacionado con una respuesta inflamatoria crónica de bajo grado con producción anormal de citoquinas ( sustancias proinflamatorias), aumento de reactantes de fase aguda y activación de las vías de señalización de la inflamación en la propia grasa. De esta forma el tejido adiposo se comporta como un órgano endocrino autónomo y sus células producen más sustancias proinflamatorias ( como la leptina) que inducen resistencia a la insulina ( aparición de diabetes) , favorecen las enfermedades inflamatorias ( provocando dolores articulares y artrosis) y también hacen que la obesidad se mantenga. Osea que la propia grasa hace que no desaparezca la grasa. Estas mismas sustancias proinflamatorias son las que se han demostrado causante del proceso de degeneración discal. Además el acúmulo de lípidos ( triglicéridos altos) provoca arterioesclerosis o obstrucción de las arterias, que también puede afectar a la circulación de la columna alterando el metabolismo del disco intervertebral por falta de riego [2] . En resumen, las estructuras alrededor del disco tienen peor circulación y la grasa en si promueve que se inflamen con facilidad.

Cuando hablamos de degeneración del disco pensamos en gente de mayor edad… “ soy joven y no es algo que me vaya a afectar a corto plazo”…pues no caigamos en el error! El disco intervertebral puede comenzar su proceso de degeneración a partir de los 20 años de edad. 

En un estudio se realizó un seguimiento a 9000 mujeres australianas de media de edad 25 años durante 12 años para ver si al ganar peso con los años tenían más posibilidades de desarrollar dolor de espalda. Con los datos obtenidos se pudo calcular que cada 5 kg de peso que se ganan se aumenta un 5% más las posibilidades de tener dolor de espalda, y que la falta de ejercicio físico aumenta un 17% las posibilidades. Pondremos un ejemplo: una persona joven que gana 10 kg en 10 años y deja de hacer ejercicio aumentaría sus posibilidades de tener dolor de espalda en un 27% ( 5 + 5 + 17). Como la prevalencia general en la población es del 30%, esa persona tiene una probabilidad del 57% de que le duela la columna [3] 

¿ Puede la obesidad afectar a la recuperación del dolor?

SI. En los pacientes con obesidad funciona peor el tratamiento conservador. Tienen menor agilidad y se fatigan más a la hora de hacer ejercicio físico, que es la base de la recuperación de la mayoría de problemas de columna. Además las infiltraciones suelen hacer menos efecto además de necesitar medios técnicos especiales ( un buen aparato de rayos en quirófano, agujas más largas…) [2] .

La obesidad y el sedentarismo son factores de riesgo MODIFICABLES, es decir, que podemos actuar frente a ellos tanto para tratar como para prevenir los dolores de espalda. Tanto si ya tienes dolor de espalda como si todavía no has notado ningún síntoma, te animo a perder peso. Notarás como aumenta tu energía y tu agilidad. 

Si necesitas consejo y apoyo te recomiendo consultar con un experto en nutrición, y si tu IMC es mayor de 35 y tienes ya alguna patología quizá seas candidato a cirugía bariátrica. Verás como perdiendo peso se solucionan la mayoría de dolores de espalda :-).

  • Bibliografía:
  • [1] Does physical activity influence the relationship between low back pain and obesity? Spine J 2014 Feb 1; 14(2): 209-216
  • [2] Association between obesity and spinal diseases. Int J Environ Res Public Health 2017 Feb 14(2): 183
  • [3] Relationships between weight, physical activity and back pain in young adult women. 2016. Brady S, Hussain SM, Brown WJ.  Medicine 95 ( 19) May