Si aparece dolor lumbar al jugar a golf…
- revisa con un entrenador que estés ejecutando correctamente la secuencia de movimientos del swing
- realiza ejercicios de estabilización dinámica del tronco, flexibilidad de columna y cadera con ayuda de un fisioterapeuta
- entrena unos días el swing clásico para disminuir las fuerzas de torsión sobre la columna.
- utiliza un carrito para ayudarte a transportar la bolsa de palos
- no olvides nunca calentar la inicio y estirar al final
El transverso se ejercita colocándose bocarriba, con las rodillas dobladas hacia el pecho y metiendo el ombligo hacia dentro ( aguantar 10 segundos, 10 repeticiones). El multífidus se ejercita bocabajo, levantando un brazo y la pierna contraria a la vez ( aguantar 10 segundos, 10 repeticiones).
Me han operado de la espalda, ¿ cuándo puedo incorporarme a jugar al golf?
La recomendación tras microcirugía lumbar es iniciar fisioterapia al mes de la cirugía, con reincorporación progresiva a las 6-12 semanas, según nivel de juego previo y progreso en cuanto a flexibilidad de columna y fortalecimiento.
De inicio se recomienda jugar en terreno sencillo, evitando la arena y zonas profundas, empezar por 9 hoyos en vez de 18 y caminar por el campo sin cargar la bolsa de palos a la espalda, en vez de ir en boogie ( caminar es parte de la recuperación). No olvidar calentar al inicio y estirar al final. Si los síntomas reaparecen al iniciar la actividad se recomienda parar 4 semanas y continuar con la rehabilitación.
En las artrodesis lumbares con colocación de tornillos y despegamiento muscular se recomienda corsé postoperatorio y no comenzar a jugar hasta 6-12 meses después. Estos tiempos se acortan notablemente con la cirugía mínimamente invasiva de columna, en la que al no lesionar la musculatura no es necesario utilizar corsé en el postoperatorio, y con una buena rehabilitación posterior se puede reiniciar la actividad deportiva alrededor del tercer mes.
The lumbar spine and low back pain in golf: a literature review of swing biomechanics and injury prevention. Cluck GS, Bendo JA, Spivak JM. The Spine Journal 8 ( 2008) 778-788